Elvis Presley, el Rey del rock and roll |
Hace poco, cuando revisaba Internet para preparar
este comentario, encontré una larga lista de celebridades del mundo de la
música y la actuación, que, infelizmente, consumieron drogas y alcohol hasta
terminar con sus vidas. Nombres de consagrados y otros de verdaderas promesas,
integran esa lista, y son solo algunos que pueden ilustrar cuánto daño hacen
las drogas al organismo humano.
¿Quién no se ilusionó alguna vez con la imagen de
un artista triunfador, de aquellos que deslumbran por su brillante carrera? La
mayoría hemos admirado a un cantante o actriz de resonantes triunfos. Pero, ¿se
han preguntado cuál puede ser el costo del estrellato, sobre todo en el mundo
capitalista?
Ser famoso, tener dinero y lujos, son condiciones
que algunos consideran importantes para lograr la felicidad; sin embargo, a
pesar de tenerlo todo, muchas celebridades viven un calvario, dedicados a mantenerse entre los más
exitosos, y a causa de ello se refugian en las drogas para olvidar su
sufrimiento. Víctimas de su adicción, unos no sobrevivieron a una sobredosis,
otros decidieron quitarse la vida.
Elvis Presley, Amy Winehouse, Janis Joplin, Whitney Houston y Michael Jackson son
algunos de los artistas muertos por excesos de drogas y alcohol, aún jóvenes y
en la plenitud de sus posibilidades artísticas.
Elvis Presley, por ejemplo, cantante y actor
estadounidense de los más populares del siglo Veinte, considerado como un icono
cultural. Lo llamaron “el Rey del rock and roll” o simplemente “el Rey”.
Su música revolucionó los gustos de la juventud
de su época, que no solo acogió el nuevo ritmo, sino que imitó a Elvis en los
movimientos osados y eróticos al bailar, y en la pose rebelde ante los
acontecimientos que conmovían su país y otras partes del mundo. Su desaparición
física sumió en un profundo dolor a sus fans y dejó un inmenso vacío en el
panorama musical de aquellos años.
La cantante norteamericana de rock and roll y blues,
Janis Joplin fue otra de las víctimas de su drogodependencia. Se caracterizó
Janis por su poderosa voz y la intensidad de su interpretación. Esta muchacha
fue un símbolo femenino de la contracultura de los años sesenta y la primera
mujer considerada una gran estrella del rock.
Desde muy joven comenzó a beber alcohol. Poco
después se hizo adicta a las drogas. Su vida íntima estuvo siempre sujeta a
problemas de personalidad y baja autoestima por su apariencia física.
Alrededor suyo se suscitaron chismes y polémicas
por su sexualidad, el desorden de sus relaciones amorosas y escándalos
vinculados a sus adicciones.
Janis murió a los 27 años. Se encontraba sola en
una habitación de hotel y no pudo superar el efecto de una sobredosis de
heroína. Aunque su paso por el universo musical de su época fue relativamente
breve, dejó en él honda huella y hoy se considera entre las mejores cantantes
de todos los tiempos.
El legado artístico de Elvis Presley y Janis
Joplin es perdurable, ellos trascendieron su tiempo a pesar de sus vicios.
Duele pensar cuánto más habrían hecho si no hubieran caído en el vicio y la
desesperanza.
Sus vidas maltrechas y el abrupto fin de sus
carreras son una lección que no debemos olvidar. Sus voces alertan sobre todo a
los jóvenes: alejarse de las drogas y el alcohol es la única solución posible
ante cualquier encrucijada que nos depare el destino.